Pasear por Torrecampo supone encontrarse con notables ejemplos de casas adinteladas de bellas portadas, la que aquí nos ocupa se sitúa en el número 25 de la calle Real.
Se trata de una construcción que , no solo conserva su fachada, sino prácticamente todo su viejo trazado. Su portada presenta un arco conopial que ostenta un bellísimo alfiz labrado. El interior reserva varia sorpresas, como las caras exteriores de la escalera de acceso a la cámara de la vivienda, que repiten motivos como bolas y rosetas. Resultan destacables algunas formas animales labradas como caracolas y un "Agnus Dei" o Cordero de Dios.
Desde hace algunas semanas un cartel de "SE VENDE" adorna la fachada. Ignoro quién será el afortunado comprador, pero lo que si es seguro es que compra una auténtica joya, digna de admirar y conservar.
Puedes estar seguro de una cosa, y es que quien la compre no reparará en la riqueza que posee, es más con toda seguridad la convertirá en una "moderna" construcción que lo único que conservará será la portada y porque por su especial protección no le dejarán tirarla.
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