lunes, 11 de agosto de 2025

Un escudo singular en Torrecampo: ¿escudo municipal o escudo nobiliario?

 


Escudo hallado en el derrumbe de una vivienda 
situada en la Plaza de Jesús número 6 de Torrecampo.



Este escudo, labrado en piedra molinaza, fue hallado entre los escombros del derrumbe de una antigua vivienda del centro histórico de Torrecampo.

Presenta elementos propios de finales del siglo XV o principios del siglo XVI, periodo de transición entre el arte medieval y las nuevas formas renacentistas promovidas durante el reinado de los Reyes Católicos.

Este testimonio material, situado en la transición entre el medievo y el Renacimiento, presenta una iconografía que invita a un doble enfoque interpretativo: ¿es un escudo nobiliario vinculado a la Orden de Calatrava, o bien un escudo institucional municipal que expresa la autonomía y poder local?

Esta ambivalencia refleja la compleja historia de Torrecampo y Los Pedroches, una comarca donde convergieron distintos poderes —militares, nobiliarios y civiles— y donde las fronteras simbólicas y jurisdiccionales no siempre eran claras.

La forma y los elementos exteriores del escudo permiten ubicarlo cronológicamente a caballo entre los siglos XV y XVI.

La proporción del campo heráldico y su diseño se alejan de los patrones medievales, presentando una traza castellana más armónica y renacentista.

El uso del león rampante, emblema de poder y vigilancia, se inscribe en una tradición nobiliaria frecuente, mientras que la cruz de Calatrava sugiere la pertenencia o vinculación con dicha orden militar-religiosa.

Uno de los rasgos más llamativos son los tenantes velludos, personajes mitológicos conocidos como "salvajes" o "hombres del bosque", que se popularizan como motivo decorativo en la época de los Reyes Católicos.

El lazo o nudo inferior es otro rasgo identificativo de la estética de los Reyes Católicos, que solía incluir elementos como cordones, conchas, cadenas o nudos como parte del lenguaje simbólico del poder. En este contexto, su presencia refuerza la cronología tardo-gótica o proto-renacentista del conjunto.


El relieve tallado muestra una composición heráldica clásica con los siguientes elementos:

  • Banda diagonal con un león rampante: símbolo tradicional de nobleza, valor, fuerza y vigilancia.
  • Parte superior (jefe): cruz en flor de lis de la Orden de Calatrava: distintivo claro de la influyente orden militar-religiosa que dominó amplias zonas del sur de Castilla.
  • Parte inferior (punta): castillo donjonado de tres torres: símbolo heráldico de fortaleza y señorío territorial.
  • Dos tenantes salvajes: figuras antropomórficas velludas que sostienen el escudo; un motivo decorativo habitual en la época de los Reyes Católicos, que denota poder y protección.
  • Lazo con nudo ornamental en la parte inferior: detalle estilístico propio de la estética tardo- gótica y proto-renacentista.


Una primera hipótesis nos llevaría a considerarlo como escudo nobiliario vinculado a la Orden de Calatrava.

Un deslinde documentado en Toledo el 22 de septiembre de 1189, donde AlfonsoVIII delimita los términos concedidos a la Orden de Calatrava, determina la relación de la Orden de Calatrava con el territorio que hoy ocupa Torrecampo:

"...ad caput del Pinar, et vadit recte ad castellum quod dicitur Murgaval, et sicut vadit ad Guadamoram, et inde procedit ad caput de los Almadenexos, quod est inter rium Guadarmes et Guadamora, et descendit a caput del Guixo, quod est super el Villar de Santa María, in extrema parte del encinar del Pedroch..."

La traducción del texto sería la siguiente:

"...hasta la cabecera del Pinar, y de allí va directamente al castillo llamado Murgaval; desde allí se dirige hacia Guadamora, y luego avanza hacia la cabecera de los Almadenexos, que está entre los ríos Guadalmez y Guadamora; desciende desde la cabecera de El Guijo, que está sobre el Villar de Santa María, en el extremo del encinar de Los Pedroches..."

 


Cruz de Calatrava junto a la
Ermita de la Virgen de Gracia de Torrecampo.


Como argumentos a favor de esta hipótesis podríamos relacionar los siguientes:

  • Cruz de Calatrava: Su inclusión suele ser exclusiva de familias o individuos con pertenencia directa o cargos en la Orden militar-religiosa, que tuvo un papel fundamental en la defensa y repoblación del sur de Castilla y norte de Andalucía.

 

Así se refleja en un documento de 31 de diciembre de 1245, en el Sitio de Jaén en el que Fernando III da a la Orden de Calatrava y a su maestre Fernando Ordóñez la villa de Priego de Córdoba para cuando sea conquistada a los musulmanes y el territorio comprendido entre Mochuelos y el río Guadalmez a cambio de los castillos de Monfrag, Bélmez, Cuzna y Elada, la torre de Cañete y el territorio entre el arroyo Guadamora y el río Guadalmez dejando a salvo los derechos y privilegios del concejo de Córdoba y de los calatravos en Chillón.

  

  • León rampante: Emblema común en linajes castellanos nobiliarios, que representa valor guerrero y fidelidad a la Corona, características propias de las casas nobles con responsabilidades territoriales.

  • Castillo donjonado: Aquel cuya torre central es más alta que las laterales. Representa la posesión de un señorío o fortaleza, reforzando la dimensión feudal y territorial propia de la nobleza.

  • Tenantes salvajes: Uso frecuente en escudos nobiliarios, simbolizan fuerza bruta y protección, vinculados a la ostentación del poder familiar.

  • Contexto histórico local: Se sabe de la existencia de casas nobiliarias vinculadas a la Orden, como la familia Fernández de Córdoba, que pudieron poseer encomiendas o señoríos en la zona.

Según esta interpretación e hipótesis, el escudo pudo pertenecer a una familia noble vinculada a la Orden de Calatrava, funcionando como símbolo tanto familiar como de autoridad jurisdiccional. Su complejidad iconográfica refleja la interrelación de nobleza, órdenes militares y monarquía en la región.


No obstante cabe también la consideración de que pudiera tratarse de un escudo municipal o institucional.

Los argumentos a favor en favor de esta posibilidad vendrían dados por las siguientes consideraciones:

  • Castillo donjonado: Símbolo habitual en escudos municipales que representa la fortaleza civil, la jurisdicción local y el poder de la villa o ayuntamiento.

  • León rampante: Aunque más común en la heráldica nobiliaria, en contextos municipales puede simbolizar la defensa de la Corona y la fidelidad de la comunidad local.

  • Cruz de Calatrava: Más que indicio de propiedad noble, podría reflejar la influencia histórica o el reconocimiento del dominio de la Orden en el territorio, sin implicar posesión directa.

  • Ubicación original probable: La fachada del antiguo Ayuntamiento sería un emplazamiento lógico para un escudo institucional que simbolizara la autonomía y el autogobierno de Torrecampo.

  • Estilo y cronología: El diseño proto-renacentista encaja con la época en que muchas villas reforzaron su identidad heráldica para consolidar su estatus municipal.


Así pues, el escudo podría ser un emblema oficial municipal que integra símbolos de diferentes fuentes de poder: la Corona (castillo), la Orden (cruz) y la comunidad local (león), reflejando una identidad híbrida que trasciende el ámbito familiar y representa la autoridad civil.

La cronología del escudo de finales del s. XV, coincide con la época en la que Torrecampo se convierte en villa jurisdiccionalmente independiente.

No deja de ser significativo que en Torrecampo hayan existido varias Cruces de Calatrava:  Una frente a la ermita de Santiago (trasladada al cementerio y hoy situada junto a la Iglesia de San Sebastián, otra en la Virgen de Veredas –hoy desaparecida– y la tercera junto a la ermita de la Virgen de Gracia.

El escudo habría servido como símbolo visual del concejo, integrando elementos que remiten tanto a su historia relacionada la Orden de Calatrava, como a su afirmación como villa autónoma.


Cruz de Calatrava junto a la Iglesia de San Sebastián
de Torrecampo, procedente de la desaparecida ermita de Santiago,
ubicada durante años en el cementerio.


Este escudo singular es un documento visual excepcional que abre una ventana a la compleja historia de Torrecampo y Los Pedroches. Ya sea un símbolo de un linaje nobiliario con encomienda de la Orden de Calatrava o un emblema municipal, sintetiza múltiples fuentes de poder, refleja la riqueza política, social y religiosa de una tierra en la que convergieron poderes diversos y múltiples identidades.

En definitiva, el escudo hallado en Torrecampo no es solo una pieza artística de alto valor estético, sino también un documento visual cargado de significado histórico y político. Tanto si representa a una familia noble como si fue símbolo del concejo, encarna la intersección de poderes —militar, nobiliario y civil— que caracterizó la Baja Edad Media y los albores del Renacimiento en Andalucía.

Las futuras investigaciones arqueológicas, archivísticas y estilísticas podrían ayudar a resolver la duda.

Mientras tanto, este escudo nos invita a reflexionar sobre la historia compleja y silenciosa de pueblos como Torrecampo. 


Para la redacción de esta entrada, se han consultado, entre otras, las siguientes fuentes:

- Márquez Triguero, Esteban. Historia de la Villa de Torrecampo.

- Molinero Merchán, Juan Andrés. Torremilano y Torrefranca: hidalguía y heráldica.

- Ocaña Torrejón, Juan. Historia de la Villa de Pedroche y su comarca.




miércoles, 6 de agosto de 2025

El litigio de la Mesta por el puente de Cantalobos: cañadas, trashumancia y conflicto jurisdiccional en el entorno de Torrecampo (1565–1567)

 

1.     

Mapa de situación del Cerro de Cantalobos.

TM de Torrecampo (Córdoba)

 

La defensa de los privilegios del Honrado Concejo de la Mesta frente a las extralimitaciones de los concejos locales constituye uno de los ejes centrales de la política judicial castellana del siglo XVI. La trashumancia de ganado, como actividad económica vital para la Corona y las elites ganaderas, requería del libre tránsito por las cañadas reales, cuya integridad legal y territorial se hallaba constantemente amenazada por impuestos, cercas, portazgos y pontazgos ilegítimos.

Uno de los casos más representativos tuvo lugar entre 1565 y 1567, cuando los procuradores de la Mesta iniciaron un proceso judicial contra el concejo de Almodóvar del Campo por el cobro indebido del paso de ganado sobre el puente de Guadalmez, situado en una de las principales rutas trashumantes entre la Meseta y los pastos invernales de Sierra Morena. Esta vía cruzaba el entorno del cerro de Cantalobos —actual término municipal de Torrecampo (Córdoba)—, atravesando la Cañada Real Soriana y el espacio de devoción pastoril del Santuario de Nuestra Señora de las Veredas.

 

 

Fragmento de Ejecutoria sobre el pontazgo del puente sobre el río Guadalmez.

AHN 1567-1568

Según el proceso judicial incoado el 8 de marzo de 1565, el procurador de la Mesta, Juan Ramírez, denunció que en dicho paraje “vecinos de la villa de Almodóvar del Campo y del lugar de San Benito cobraban derechos por pasar el ganado por el puente del río Guadalmez, lo que es contra los privilegios y franquezas de esta Mesta”. La denuncia se dirigía expresamente contra Miguel Martínez, Miguel Mantero y Blas Romero, este último vecino de San Benito y presunto arrendador del pontaje.

Los hechos denunciados se centraban en el cobro de veinte reales por cada rebaño que pasaba el puente. Las cifras son reveladoras: según consta en el expediente, “por dicho puente solían pasar cada año más de quinientas manadas de ganado mayor y menor, así de ovejas como de vacas y cabras”, lo que implicaba un ingreso aproximado de 10.000 reales anuales (calculado en 500 rebaños × 20 reales), equivalentes a 250 ducados. Se trataba, por tanto, de una renta considerable, especialmente para concejos pequeños que veían en el control de estos pasos un recurso fiscal complementario.

A lo largo del proceso se incorporaron numerosos testimonios de pastores afectados, como el de Juan Garcés de Marcilla, quien declaró haber pagado “más de veinte ducados en los últimos años”, o el de Alonso Carrillo, quien “pagó siete ducados por pasar siete rebaños”. En palabras de Juan Ramírez:

“Estos derechos se exigen sin facultad ni privilegio alguno, y con amenazas de que no se les dejará pasar por el puente si no los pagan”.

“Pagaban los ganaderos con temor, por no ser detenidos, y aún algunos vendían parte de su ganado para poder pasar”.

La defensa presentada por el concejo de Almodóvar del Campo se basó en la alegación de que el puente había sido construido y mantenido por sus vecinos, sin participación de la Hacienda Real ni del Honrado Concejo de la Mesta. Por tanto, el cobro de un pontaje no era más que una “remuneración voluntaria por el uso de una obra que evitaba a los pastores vadear el río con riesgo para el ganado”.

Blas Romero, uno de los acusados, declaró:

“No fue forzado ninguno a pasar por dicho puente, que bien podían vadear más arriba o más abajo, mas si querían pasar por donde es firme y segura la obra, convenía pagar algo para su conservación”.

“Siempre se cobró alguna cantidad, y nunca los ganaderos lo tomaron a pleito, ni lo reclamaron por agravio”.

Según esta tesis, el uso del puente no era obligatorio y, en consecuencia, tampoco lo era el pago. Además, se presentaron testimonios de otros vecinos que aseguraron que la práctica del cobro era antigua y no había sido impugnada anteriormente.

 

 

Fragmento de Ejecutoria sobre el pontazgo del puente sobre el río Guadalmez.

AHN 1567-1568


La resolución dictada  por el alcalde entregador Rodrigo de San Cebrián fue rotunda. En base a los privilegios reales de la Mesta —cuya legitimidad fue reconocida como “plenamente vigente y vinculante”— se determinó que ningún concejo ni particular podía imponer cargas al tránsito ganadero por cañadas reales o pasos públicos.

“Y por cuanto es probado que lo que se ha cobrado se ha hecho sin título ni facultad, mandamos que cesen tales cobros, y que los responsables restituyan lo percibido, con pena de cincuenta mil maravedís para la Cámara de Su Majestad por cada vez que reincidan”.

“Y si de nuevo impidieren o dificultaren el paso a los rebaños de la Mesta, se proceda contra ellos como contra perturbadores del real servicio”.

Esta multa, equivalente a 137 ducados, servía como sanción disuasoria ante futuras transgresiones. El fallo incluía además una orden expresa de devolución de las cantidades exigidas desde al menos cinco años antes del proceso.

El concejo de Almodóvar interpuso apelación ante la Real Chancillería de Granada, cuestionando la competencia del alcalde entregador y defendiendo la legitimidad del cobro como una práctica consuetudinaria y necesaria para el sostenimiento de las obras públicas. Alegaron además que “los derechos de la Mesta no pueden prevalecer allí donde la infraestructura es enteramente de carga vecinal”.

Sin embargo, el tribunal granadino confirmó la sentencia el 20 de diciembre de 1566, reforzando los argumentos de la parte mesteña. Posteriormente, el 29 de julio de 1567, se emitió sentencia en grado de revista, ratificando los fallos anteriores y ordenando la expedición de carta ejecutoria, que fue otorgada el 15 de agosto de 1567.

“Y visto lo actuado, fallamos que los dichos vecinos no tienen razón ni facultad para imponer tal tributo, por ir contra la ley de las cañadas y contra los privilegios concedidos a la Mesta” (Registro de Sentencias, Granada, 1567).

“Mándase que se publique esta sentencia en los lugares públicos del reino, para ejemplo de otros concejos y escarmiento de infractores”.

 


Vista ampliada del entorno del Río Guadalmez frente al Cerro de Cantalobos, 

donde se ubicaba el puente objeto del litigio.

El conflicto se localiza en un área de tránsito estratégico de la trashumancia: el entorno del cerro de Cantalobos, en la actual provincia de Córdoba, dentro del término municipal de Torrecampo. Esta región está atravesada por la Cañada Real Soriana, que servía de corredor para el movimiento anual de ganado entre los pastos de verano de la Meseta y los invernaderos andaluces.

Cantalobos, además, se halla próximo al Santuario de Nuestra Señora de las Veredas, un lugar de culto tradicional muy vinculado a la religiosidad pastoril. La concentración de rebaños en esta zona alcanzaba cifras muy significativas: más de 500 rebaños por año, lo que puede estimarse en un tránsito de al menos 250.000 cabezas de ganado si consideramos una media de 500 cabezas por rebaño.

 

En el año 1732 este puente aparece como propiedad de Nuestra Señora de las Veredas:

Que la obra de fábrica de Ntra. Sra. de las Veredas (…) tiene por suya propia una puente de madera que llaman de las Ovejas, a corta distancia de dicha ermita, en el río Guadalmes, que divide este término con el de el Campo de Calatrava, Arzobispado de Toledo.

Por cuya puente pasa el ganado lanar de la Real Cañada, cuando baja a invernar a Extremadura y vuelve a subir a la sierra, por cuyo pasaje y por cada rebaño dan a dicha obra y fábrica cierta limosna”  

(AHMT año de 1732)


Este pleito constituye un ejemplo paradigmático de la firme defensa de los privilegios mesteños frente a los intentos locales de fiscalización del tránsito pecuario. La documentación judicial revela una estructura jurídica sólida en defensa de la trashumancia, basada en el principio del libre paso y en la prioridad de los privilegios reales sobre los intereses particulares o concejiles.

La resolución favorable a la Mesta consolidó un precedente de gran importancia, no solo en lo jurídico sino también en lo económico, al preservar la continuidad de una de las rutas ganaderas más activas del Reino de Castilla. A la vez, evidenció los riesgos constantes que enfrentaban los pastores trashumantes frente a la fragmentación jurisdiccional y las prácticas fiscales irregulares.

Del mismo modo el documento viene a plasmar la importancia geográfica de Torrecampo durante la Edad Moderna que se plasmó en un importante desarrollo económico, sin olvidar el transcendental papel histórico que desde sus inicios ha tenido el Santuario de la Virgen de Veredas, como una de las principales puertas de entrada de los ganados trashumantes que bajaban de Castilla hasta Andalucía y Extremadura.

viernes, 1 de agosto de 2025

Torrecampo: torre de silencio.

 

                                                         

     Boceto de la torre de la Iglesia de 
      San Sebastián creado con IA.
                    

Al leer con detenimiento la crónica publicada en El Defensor de Córdoba el 28 de agosto de 1914, no cuesta imaginar la emoción con que el pueblo de Torrecampo vivió la reapertura de su templo parroquial. El lenguaje exaltado del artículo —fiel reflejo de su tiempo— transmite un entusiasmo colectivo que, más de un siglo después, sigue conmoviendo.

Y, sin embargo, entre las líneas del júbilo y la solemnidad, hay una ausencia que apenas se menciona y que, con el paso del tiempo, ha caído en un silencio asumido: la torre del templo no fue reconstruida completamente. La obra que permitió recuperar el uso litúrgico del edificio no llegó a culminar su arquitectura histórica.

No fue un error ni un olvido, sino una decisión práctica, quizás inevitable en su momento. Pero lo curioso es que, desde entonces, pocos han querido mirar directamente esa carencia. Como en el cuento de El traje nuevo del emperador, la comunidad prefirió contemplar lo que se había conseguido —y era mucho— sin detenerse demasiado en lo que faltaba.

Este tipo de omisiones, cuando se repiten, acaban formando parte del paisaje: la torre que no está ya no duele, ni se echa de menos, porque se ha aprendido a no nombrarla. Y, sin embargo, recordarla es también un modo de reconocer la historia completa, sin idealizaciones ni desmemorias. Porque la memoria colectiva no solo se construye con celebraciones, sino también con los silencios que decidimos romper.

Tal vez hoy, más de un siglo después, sea el momento de mirar de nuevo hacia arriba. Y preguntarnos —sin nostalgia, pero con conciencia— qué otros elementos ausentes hemos ido aprendiendo a no ver.



Vista de la Iglesia de San Sebastián 

de finales del s.XIX.

 

 Reproducimos el artículo completo de El defensor de Córdoba 28 de agosto de 1914:


“La solemne función religiosa celebrada en este pueblo en el día de ayer, 22 de agosto, con motivo de la reapertura del templo parroquial, será de grandísimo y simpático recuerdo por espacio de muchos años para todos los que hemos tenido la satisfacción de presenciarla.

Cerrada a la iglesia parroquial coma hace 7 años, por disposición del ilustrísimo señor obispo de la diócesis, a causa de su estado run ruinoso, fue trasladado el culto a la ermita de Nuestro Padre Jesús, la que por falta de capacidad, hacía poco menos que imposible que los fieles pudieran cumplir con el precepto de oír misa los domingos y días de fiesta, y que esto era causa de que este religioso pueblo sintiera vehementes deseos y general anhelo por ver terminadas las obras de reparación, que se han llevado a cabo con limosnas de los fieles y que no han omitido sacrificio por ver realizados sus deseos, devolver a dar culto a Dios en el antiguo templo, al que todos los hijos de este pueblo miramos como nuestra propia casa solariega, por haber recibido en ella las saludables aguas del bautismo, y cumplido las demás obligaciones de cristianos; por esto no es extraño que pobres y ricos hayan rivalizado en contribuir, unos con dinero y con su trabajo personal los que absolutamente carecen de recursos pecuniarios.

Hoy por fin, gracias a Dios, en el día de ayer se han visto realizadas las vehementes aspiraciones de estos fieles, que han celebrado con demostraciones de extraordinaria alegría, notándose retratada en todos los semblantes tal satisfacción de gozo, que es imposible explicar con palabras y solo se puede comprender presenciando el vivo entusiasmo que reinaba en todos los corazones; baste decir que multitud de forasteros venidos de los pueblos inmediatos a presenciar tan solemne acto, quedaron admirados de ver no solo tan grandiosa y espontánea manifestación de fe, sino también la cultura y religiosidad de estos vecinos que recuerda los mejores tiempos del cristianismo.

No quiero detenerme a referir, por no hacer demasiado larga esta crónica coma los muchos rasgos de ferviente piedad realizados por estos hijos del trabajo; baste decir que muchos de ellos hicieron derramar lágrimas de ternura que edificaban a los más indiferentes, sobre todo al salir por la puerta de la ermita de Jesús el Santísimo Sacramento y sonar los acordes de la Marcha Real, ejecutada por la banda municipal.

Deseoso el señor cura ecónomo de esta parroquia que la función revistiera el mayor esplendor, invitó a varios señores sacerdotes de los pueblos vecinos, que con su presencia prestaron mayor solemnidad a los cultos celebrados; y en efecto llegada la hora de las 9:00 h de la mañana del memorable día 22 de este mes, reunidos en la plaza de Jesús todos estos vecinos, con su dignas autoridades a la cabeza y con asistencia de las hermandades, cofradías y asociaciones con sus respectivos estandartes, se organizó la solemnísima procesión con el Santísimo Sacramento, llevado bajo palio, cuyas varas eran llevadas por los cofrades de su hermandad, recorriendo las calles más céntricas de la población, que se hallaban ricamente engalanadas con la misma pompa que en las procesiones del Santísimo Corpus.


Vista actual de la Iglesia de San Sebastián

con la torre-espadaña en primer plano.


Toda la carrera de la procesión fue un continuo desbordamiento de entusiasmo, pues apenas cesaban muy cortos momentos de dar vivas al Santísimo y a la religión católica coma que eran contestados con igual fervor.

Llegada que fue la procesión al templo parroquial, dio principio la misa, que celebró el señor cura ecónomo de esta parroquia don Santiago Calero, sirviendo en ella de diácono y subdiácono don Alfonso Lafuente y don Juan Cabrera, coadjutores de esta parroquia y asistiendo de caperos los señores curas párrocos de Pedroche y dos Torres.

El sermón estuvo a cargo del señor arcipreste de este partido don Antonio Rodríguez Blanco, que, en un hermosísimo exordio acomodado a las circunstancias, manifestó su admiración al presenciar el entusiasta fervor de estos fieles y dio gracias a Dios por haber tenido ocasión de contemplar uno de los actos religiosos que más le han edificado en su ya larga carrera sacerdotal.

Terminada la misa, en medio de un calor sofocante coma por el numeroso concurso de fieles que llenaban no solo las anchas naves de la Iglesia coma sino también sus espaciosas tribunas se cantó un solemne Te Deum en Acción de Gracias e inmediatamente después, el clero, autoridades y gran número de distinguidas personas de la localidad, previamente invitados por el señor alcalde pasaron al hermoso salón del ayuntamiento donde fueron obsequiados con refrescos, licores, pastas y ricos habanos costeado todo por el ayuntamiento, testimoniando así la parte tan íntima que tomaba en la gente general satisfacción que embargaba a todo el pueblo.



Interior Iglesia de San Sebastián.

Antes de pararse los invitados al refresco, tomó uso de la palabra el referido señor arcipreste, para felicitar al señor cura por el celo que ha demostrado en las obras de la reparación del templo y al ayuntamiento y vecinos de la población por su cooperación a una obra tan cristiana y social y por su religiosidad y compostura que le honra en todos los actos religiosos.

En medio de la general alegría que se revelaba en todos los semblantes, se cernía como nube siniestra que nublaba hoy en gran parte el gozo de muchos, con el recuerdo del que por muchos años fue nuestro querido párroco don Francisco Madrid, quien por su celo, su sabiduría y su carácter franco y generoso merecía con justicia la estimación y entrañable afecto con que todas sus feligreses le distinguían, y recordando en este día solemne el interés con que dicho señor organizó y principio los trabajos de la restauración del templo, que no ha visto terminada por haberlo arrebatado de entre nosotros la muerte inexorable. Dios le haya premiado su religioso celo en la gloria coma como lo hemos pedido los que tuvimos la honra de ser sus feligreses”.



Boceto de la torre a construir en la Iglesia de
San Sebastián de Torrecampo.



lunes, 20 de septiembre de 2021

La Virgen de Veredas regresa a su ermita.

 



Tras casi seis meses de estancia en la Iglesia de San Sebastián, la Virgen de Veredas volverá a su ermita el próximo domingo 26 de septiembre.
Desde el 3 de abril en que la Virgen de Veredas se presentó al pueblo torrecampeño presidiendo el altar mayor de la iglesia parroquial, cientos de devotos han podido visitarla y acercarse a Ella.

Con motivo de las fiestas patronales, se ofreció la tradicional novena en su honor y la misa mayor del 1 de mayo fue presidida por el Obispo de la Diócesis de Córdoba.

La Hermandad torrecampeña ya anunció que la Virgen de Veredas regresaría a su santuario cuando las circunstancias sanitarias permitieran un traslado solemne de la venerada patrona de Torrecampo.

En Asamblea General Ordinaria,celebrada el pasado mes de agosto,  la Hermandad de María Santísima de las Veredas Coronada comunicó la fecha de llevada.

Aunque inicialmente había prevista una procesión extraordinaria por las calles más céntricas de la localidad para el sábado 25 de septiembre y la llevada a hombros hasta la ermita, finalmente se ha decidido seguir extremando precauciones y realizar el traslado en carreta tirada por animales.

Así los actos a celebrar son los siguientes:

Del jueves 23 al sábado 25 de septiembre, solemne triduo en honor a nuestra Excelsa Patrona, a las 20 horas en la Iglesia de San Sebastián.

El domingo 26 de septiembre, a las 9 de la mañana salida de la Virgen de Veredas en carreta, por el "camino del prao ".

A la llegada al santuario, Santa Misa en el altar de campaña.

Terminada la misa, entrada de la Virgen de Veredas en su Ermita.

Se culmina de este modo un doble acontecimiento histórico para Torrecampo y devotos de la Virgen de Veredas, por cuanto se ponen fin a los actos del XXV Aniversario de la Coronación Canónica(inicialmente previsto para 2020) y por cuanto la Virgen de Veredas regresa a su templo después permanecer en su pueblo durante el período de tiempo más largo hasta el momento.






viernes, 17 de septiembre de 2021

Seis torrecampeños deportados en campos de concentración nazi, hijos predilectos de Torrecampo a título póstumo.



Con motivo del nombramiento de hijos predilectos a título póstumo de seis torrecampeños deportados a los campos de concentración nazi, Cristina Manolo Héctor,de la Asociación Triángulo Azul Stoplersteine Córdoba ha ido desgranando en redes sociales la biografía de sendos homenajeados que vivieron en primera persona la barbarie ocasionada por la II Guerra Mundial. 



RUFO LÓPEZ ROMERO

Profesión: herrero.

Lugar y fecha de nacimiento: Torrecampo, 19/12/1905.

Familiares: sus padres eran Tomás López y Francisca Romero. El 25/01/1937 contrae matrimonio con Francisca Terencia Delgado Alarcón en Torrecampo.

Captura: republicano español que entró en Francia el 9/04/1939 durante la Retirada. Fue detenido el 18/10/1941 en el nº 13 de la rue Louis Blanc en Moulins, como parte de la Operación Porto por "paso de agentes y material de guerra a la Línea de Demarcación". Fue internado en la prisión de Nevers, luego en Fresnes. Fue deportado NN ("Noche y Niebla") el 10/12/1941 desde París a la prisión de Essen (Düsseldorf). Luego iría de prisión en prisión: Wittlich (Colonia) del 22 de julio de 1942 al 27 de septiembre de 1943; Breslau (Silesia), segunda sede del tribunal a cargo de las NN. 

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE GROSS ROSEN:

- Fecha de llegada: 10/05/1944.

- Matrícula: 80034.

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE BUCHENWALD:

- Fecha de llegada: 19/02/1945.

- Matrícula: 110754.

Fue adscrito al Osterode Kommando, una comuna ubicada a 60 km al noroeste de Nordhausen. Trabaja en la fabricación de dispositivos aeronáuticos (en Freiheit)  y en el proyecto "Dachs IV" de obras subterráneas que lleva a cabo la organización Todt para el refinado de aceites minerales en Petershütte. Cerca de 300 detenidos estaban registrados allí.

- Fecha y lugar de la liberación: 11/04/1945, CAMPO DE MITTELBAU-DORA.

OTROS: fue repatriado el 14 de mayo de 1945 a Hirson (comuna francesa en Aisne). Se le atribuye la tarjeta de Deportado Político nº 1.106.07989 a raíz de la decisión del Ministerio de Asuntos de Veteranos y Víctimas de Guerra el 9/11/1953.

- Fecha y lugar de defunción: 28/04/1977 en el nº 41, Cité Noël en Burdeos, en la casa que construyó para su familia: su mujer, Terencia y sus tres hijos, Tomás, Carmen y Juana.


Sus hijas, Carmen y Juana, han construido su historia con sus recuerdos, lo poco que les contó sus padres y con la información que han ido recopilando. Dentro de poco, la historia de su padre estará plasmada en un breve audiovisual que la Asociación está realizando con sus testimonios y que servirá de complemento a una exposición de los deportados de la Comarca de Los Pedroches.




CASIMIRO ROMERO ESTRELLA

Profesión: minero.

Lugar y fecha de nacimiento: Torrecampo, 04/03/1905.

Familiares: sus padres eran Antonio Romero Sánchez, bracero, y Justa Estrella Giménez, ambos de Torrecampo. Residieron en la calle Llanos nº 3 de Pozoblanco (CO).

ALEMANIA:

- Stalag (campo de prisioneros de guerra): IX-A Ziegenhain (entre Frankfurt y Kassel, Alemania).

- Convoy: parte hacia Mauthausen con 91 republicanos, de los cuales 76 mueren.

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE MAUTHAUSEN:

- Fecha llegada: 13/08/1940. 

- Matrícula: 3795.

- Kommandos y traslados: fue trasladado al subcampo de Gusen el 24/01/1941, matrícula: 9645.

- Fecha y lugar del asesinato: 02/07/1941, Gusen.




EUSEBIO CRESPO DÍAZ

Profesión: agricultor.

Lugar y fecha de nacimiento: Torrecampo, 26/09/1908.

Familiares: Padres - Pablo Crespo Sánchez, labrador, de Torrecampo y María Díaz Pastor, de Pedroche. 

Se casó con Ignacia Cortes Luque el 05/06/1933 y tuvieron dos hijas María Magdalena Crespo Cortes, nacida el 25/05/1934, y Josefa Cirila Crespo Cortes, nacida el 15/11/1936 y fallecida con dos años. Ignacia también tuvo un aborto de gemelos como consecuencia de la notificación de la muerte de su hermano Bautista (quinta del 31) en la batalla de Teruel en los primeros meses de 1938.

ESPAÑA: De la quinta del 29. Enrolado en el cuerpo de Carabineros como suboficial.

FRANCIA: 

- Campo de internamiento de Saint Cyprien en abril de 1939.

- CTE (Compañía de Trabajadores Extranjeros): 34 CTE, 6 compañía del ejercito Frances de los Alpes.

 Recorrido en Francia con la CTE: La Palud (Savoie) en julio de 1939; Col. de la Madeleine, La Chambre el 05/07/1939; Saint Remy el  27/09/1939.                                                                                                    

- El 16/06/1940 es capturado por los nazis en Besançon, a 30 km de Suiza.

- Frontstalag (campo de prisioneros en el mismo frente): 123 Langres. Matrícula: 573. Aquí permanece durante cinco meses.

ALEMANIA: 

- Stalag (campo de prisioneros de guerra) X-B Sandbostel (Norte de Bremen, Alemania). Llegan el 19/11/1940; matrícula: 84061. Permaneció durante 3 meses y 11 días.

- Convoy: Sale el 28/02/1941 hacia Mauthasen con 254 republicanos, de los cuales mueren 180. El viaje duro 53 horas.

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE MAUTHAUSEN:

Fecha llegada: 03/03/1941. A su llegada al campo de concentración coincide con su paisano Juan Romero Arroyo durante dos meses y seis días. Matrícula: 3312.

Kommandos y traslados: fue trasladado a Gusen el 02/08/1941; matrícula: 13376. Vuelve a reunirse con su amigo y paisano Juan Romero Arroyo que estarían juntos hasta el 02/12/1941 en que sería asesinado.

Fecha y lugar del asesinato: 02/02/1942, Gusen. Según el registro de muertos del campo de concentración de Mauthausen falleció a las 8:30 h. de Herzklappenfehler (enfermedad de las válvulas del corazón). Ese día fueron asesinados 23 personas, de los cuales 12 eran españoles.


En su libro, Tomás, su nieto, escribe "Una idea me perturba y me impide conciliar el sueño, cierro los ojos y te veo, estás entre mis brazos, abrazándote, acariciando ese cuerpo destrozado, corren las lágrimas, al contemplar lo que te han hecho, mi corazón se estremece, me derrumbo al ver cómo te vas. Echo de menos no haber compartir contigo esos momentos de infancia, acurrucado en tus brazos y escuchando tus historias. Tus cenizas no las puedo traer, pero sí tu memoria y tu espíritu regresarán al pueblo que te vio nacer.

Gracias abuelo.  Que tu sufrimiento y muerte haya servido para que tu familia viva dignamente".



ANTONIO ROMERO RÍSQUEZ


Lugar y fecha de nacimiento: Torrecampo, 09/09/1915.

Familiares: sus padres eran Luis Romero Alamillo, bracero, y Francisca Rísquez Romero, ambos de Torrecampo. 

FRANCIA: 

- Campo de internamiento: Vernet d'Ariège (Francia).

- Prisión: Le Vernet, Caserne Cafarelli (Tolousse, Francia), 30/06/1944; Burdeos, 09/08/1944.

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE DACHAU: 

 - Fecha de llegada: 28/08/1944.

 - Matrícula: 94177.

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE MAUTHAUSEN:

- Fecha de llegada: 16/09/1944.

- Matrícula: 99013.

- Kommandos y traslados: fue trasladado a Ebensee el 23/09/1944.

- Fecha y lugar de liberación: 06/05/1945, Ebensee.

OTROS: fecha y lugar de defunción: 25/11/1991, en Lagardelle-sur-Lèze (Alto Garoña).




JUAN ROMERO ARROYO

Coincidió con su paisano Eusebio Crespo Díaz durante algo más de dos meses en Mauthausen y algo más de 4 meses en el subcampo de Gusen.


Profesión: jornalero.

Lugar y fecha de nacimiento: Torrecampo, 15-9-1912.

Familiares: sus padres eran Alfonso Romero Herrero, bracero, y Raimunda Arroyo Campos, ambos de Torrecampo. 

FRANCIA:

- CTE (Compañía de Trabajadores Extranjeros): 25 CTE. Recorrido en Francia con la CTE: Saint-Cyprien – Suippes – Poudrerie de Rocamadour – La Moselle (Clermont-en-Argonne) – Colmar. 

- Captura: Vosges y Territorio de Belfort (Francia) en junio de 1940.

- Frontstalag (campo de prisioneros de guerra en el frente): 140 Belfort.

ALEMANIA:

- Stalag (campo de prisioneros de guerra): XI-B Fallingbostel (Baja Sajonia, Alemania). Matrícula 87820.

- Convoy: parte el 25 de enero y transporta a 1.472 republicanos, de los cuales mueren 1.079. 

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE MAUTHAUSEN:

- Fecha de llegada: 27/01/1941.

- Matrícula: 6513.

- Kommandos y traslados: fue trasladado al subcampo de Gusen el 08/04/1941. Matrícula: 12152.

- Fecha y lugar del asesinato: 02/12/1941, Gusen.



JUAN ROMERO ROMERO 


Lugar y fecha de nacimiento: Torrecampo, 21/04/1919.

Familiares: sus padres eran Antonio Romero Campos, bracero, y Rosa Romero Toledo, ambos de Torrecampo.

ESPAÑA: XVº Cuerpo 33ª Brigada mixta. Lugares de destino: Batalla del Ebro, Guadarrama, Brunete, Guadalajara, Teruel. Tras la caída de Cataluña, en febrero de 1939, pasó la frontera francesa por Puigcerdá.

FRANCIA: 

- Campo de internamiento de Vernet d'Ariège (Francia).

- II Guerra Mundial: Legión extranjera.

- Captura: Épinal (departamento de Vosgos).

ALEMANIA:

- Stalag (campo de prisioneros de guerra): III-A Luckenwalde (Brandeburgo).

- Convoy: a lo largo del mes de agosto de 1941 hay pequeños convoyes que llegan a Mauthausen y transportan 197 republicanos; el referido a Juan Romero está formado por 24 republicanos.

CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE MAUTHAUSEN:

- Fecha de llegada: 05/08/1941.

- Matrícula: 3799.

- Perteneció al Kommando César, dirigido por el kapo valenciano César Orquín y estaba formado casi exclusivamente por deportados republicanos, cuyos trabajos eran la cantera, construcción de carreteras; luego se incorporó a un kommando de desinfección, cuyo trabajo era la recogida de la ropa de los recién llegados en el comando de desinfección.

- Fecha y lugar de la liberación: 05/05/1945, Mauthausen.

OTROS: se casó en 1947 y tuvo 4 hijos. Trabajó en un viñedo y una bodega que fabricaba champagne. Obtuvo la nacionalidad francesa en los 60. 

- Fue condecorado Caballero de la Legión de Honor en 2016. Su madrina fue Yvette Lundy, una figura de la Resistencia francesa a los nazis deportada al campo de Ravensbrück. (Foto cortesia de Patrick Sánchez).

- Declarado Hijo Predilecto de la provincia de Córdoba, el 26/02/2021, por la Diputación Provincial de Córdoba.

- Fecha y lugar de defunción: 03/10/2020, Ay (Épernay, Francia).

miércoles, 15 de septiembre de 2021

Jornadas de Memoria histórica en Torrecampo.




El Ayuntamiento de Torrecampo, con la colaboración de la Excelentísima Diputación de Córdoba y la Fundación Prasa, continúa con las  jornadas de Memoria Histórica iniciadas durante el mes de junio, con el objetivo de homenajear a los torrecampeños deportados en los campos de concentración nazi. 

Las jornadas se llevarán a cabo los días 18 y 
19 de septiembre, conforme a la siguiente programación:

18 DE SEPTIEMBRE 

11:00 horas: Conferencia  "los españoles en los campos de concentración nazi" .

Ponente: Carlos Hernández de Miguel.
Lugar: Salón de actos de la Casa de la Cultura.


El periodista Carlos Hernández de Miguel. 

Carlos Hernández de Miguel es periodista y experto en comunicación empresarial y política. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, inició su carrera profesional en Antena 3 Televisión como cronista parlamentario en el Congreso de los Diputados. Posteriormente ejerció de corresponsal de guerra en diversos conflictos internacionales, como Kosovo, Palestina, Afganistán o Iraq. En los últimos años fue redactor jefe del seminario La Clave y asesor de comunicación política y empresarial. En 2015 publicó su primer libro, Los últimos españoles de Mauthausen (Ediciones B). En la actualidad colabora con publicaciones y diarios digitales como la revista Viajar y Eldiario.es

12:30 horas: Inauguración de la exposición "Los olvidados" en el Museo Prasa de Torrecampo.

Coincidiendo con la segunda parte de las jornadas de Memoria Histórica de Torrecampo,  el Museo Prasa Torrecampo abrirá de nuevo sus puertas, cerradas durante demasiados años, para acoger esta exposición que permanecerá , al menos,  hasta finales de año.
Se trata se una excelente oportunidad de conocer un edificio singular y cargado de historia y simbolismo.

19 DE SEPTIEMBRE 

12:00  horas:  Ceremonia oficial de nombramiento de hijos predilectos a  título póstumo de :

Eusebio Crespo Díaz

Rufo López Romero

Juan Romero Arroyo 

Casimiro Romero Estrella

Antonio Romero Rísquez

 Juan Romero Romero.

Lugar: Salón de actos de la Casa de la Cultura. 

Al acto han confirmado su asistencia, entre otras personalidades,  Dª Mª Dolores Amo Camino (Vicepresidenta 1ª de la Diputación de Córdoba), D. Ramón Hernández Lucena (Diputado Delegado de Memoria Democrática) y D. Dominique Lévêque (Alcalde de Aÿ-Champagne, localidad francesa en la que residió  Juan Romero Romero hasta su fallecimiento. 







martes, 20 de abril de 2021

Veredas torrecampeña.



"

" VEREDAS TORRECAMPEÑA "

Llegó la Madre en silencio,
sin júbilo ni jaleo.
No había bullicio en la plaza,
ni de campanas volteo.

Más desde el infinito cielo,
con todo su manto tendido,
fue bendiciendo, uno a uno,
a todo torrecampeño.

Llegado el tiempo de Gloria,
la recibió el pueblo, humilde,
con devoción y alegría,
de las Veredas, Dulce María.

Ofreciose a Nuestra Patrona,
como Invitada de Honor,
morada en el mejor templo,
presidiendo el Altar Mayor.

No frecuenta mucho el pueblo,
la Torrecampeña Mayor;
pues la historia nos cuenta
que en Su ermita está mejor.

Mas ha pedido la venia,
de venir a Torrecampo
a redimir nuestras penas
en época de pandemia.

Desde el alba al ocaso
las puertas están abiertas
y recibe las visitas,
sonriente, siempre contenta.

Mujeres, hombres y niños
te adoran con devoción,
rogándote mil favores
y suplicando perdón.

Y no sólo los de Tu pueblo
acuden a Tu presencia,
muchos de otros vienen,
a contemplar Tu belleza.

Suspiros, lamentos y llantos,
recuerdos, anhelos y cantos,
alegría, tristeza y placer,
deseos , secretos y rezos.

Todos los sentimientos se abren
ante la Madre del Cielo.
Acércate a la Virgen buena
y de pedir no tengas miedo.

Mientras la plaga perdure
en tu pueblo quedarás,
flores y cantos te esperan,
contenta has de quedar.

Fachadas, balcones y rejas,
calles engalanadas,
todo poco se le antoja
a este pueblo que te adora.

Rosas de mil colores,
claveles y gitanillas,
petunias, geranios,
jazmines y buganvillas.

Más todas las flores del mundo
no se pueden comparar
con tu bello y puro rostro,
Virgen guapa sin igual.

En bautizos y comuniones
confirmaciones y Novena
presente este año estarás,
testigo de los sí, quiero
y de más de un funeral.

Llegado el "Primero Mayo",
día grande sin par,
cuatro misas hay previstas
para a todos cobijar.

Más cerquita te tendremos,
más a mano a visitar,
ofrecerte nuestros versos
y cantándote rezar.

Si el virus nos lo permite,
como merece la ocasión,
no faltará en la merienda
un buen plato de lechón.

Regado con un buen vino
degustaremos jamón,
y las típicas tortillas
de patatas, espárragos y criaíllas.

Brindaremos por aquellos
que a Tu lado te llevaste
y por los enfermos pedimos
que puedan por fin curarse.

También por todos los nuestros
que lejos de aquí se encuentran,
añorando que llegue el día
de poder estar de vuelta.

Y por todas esas personas
que no nacieron tiznadas,
pero que acuden a Tus plantas
de Tu hermosura prendadas.

Mas Tú bien sabes de sobra,
que la costumbre no es esta.
Queremos que todo pronto pase
y llevarte a Tu ermita presta.

Aún así todos queremos,
si bien por otros motivos,
volverte a ver en Torrecampo.

Y mientras en el pueblo estés,
cuida de todos nosotros
y riega bien nuestros campos.


Adrián Pérez Campos
Abril 2021